MOMENTOS

Vivimos atropelladamente, sin disfrutar de los pequeños momentos, sin saborear minuto a minuto lo que significa gozar de una deliciosa compañía, de un día sencillamente maravilloso, de una playa espectacular, con aguas limpias y cristalinas. No le damos importancia a estos momentos, pasan por nuestra vida y los dejamos ir,no nos damos cuenta de que son estas pequeñas cosas las que dan la felicidad auténtica, son momentos en que no piensas en nada más, solo deleitarse con un entorno incomparable, y fundirse en el, olvidarse de los restaurantes, un buen "bocata" y una cerveza, y como mantel la arena de la playa, saboreando un rato inolvidable. Solo fue un día, más bien unas horas, que pasaron volando, pero mientras duró, se paró el mundo para mí. La verdad es que la vida tenía que ser así, vivirla y disfrutarla día a día. Dije alguna vez que el Sol influía en mí como vitaminas reparadoras, si a esto le unimos la playa , el mar, y una deliciosa compañía, tenemos todos los ingredientes para pasar un día en donde solo piensas en disfrutar y olvidarte por unas horas de todo, es un día sin problemas, por lo menos hoy han estado escondidos.
No recuerdo quien lo dijo, pero alguien, alguna vez, definió la felicidad, más o menos así:
"La felicidad humana generalmente no se logra con grandes golpes de suerte, que pueden ocurrir pocas veces, sino con pequeñas cosas que ocurren todos los días"
Por eso yo pienso, tenemos que tratar de pasar por esta vida gozando de estos pequeños momentos y regocijarse en ellos,busquemos la felicidad en las pequeñas cosas, porque cuando nos falten, las echaremos de menos.